jueves, 3 de marzo de 2011

La vida es contenido mas las formas cambian.

Un verano estudiando gramáticas de la lengua castellana (al pedo dicho sea de paso porque seguramente pierda) dañó mis capacidades creacionales; que solía tener hasta hace poco (que son muchas y lo digo con toda humildad). Hace ya un par de meses que me veo incapaz de escribir algo que me satisfaga como escritor. No sólo en el plano pseudoperiodístico en el que aquí me muevo sino en el literario. He tenido brillantes ideas últimamente mas nunca puedo llevarlas a cabo porque pienso mucho en la forma. Antes plasmaba todo y después vería como quedaba, y como corregirlo, pero más que nada ortográficamente (y no muy bien dicho sea de paso porque tengo un remake tuneado de lo que más me ha gustado ‘:$’).

Ayer el Dejo me dijo celoso. Bueno, fue un intento desesperado de ocuparme de la forma y que otro ponga contenido; más que nada para sentirme útil para el blog. Pero, ¿para qué mentir? Es cierto que el estilo -escribir como hablando- es lo mejor a la hora de plasmar tanta metáfora bohemia pedorra que pone. La cosa es pulirlo luego, para cuando columnistas importantes de los diarios fachos montevideanos e investigadores de ciencias sociales lean nuestras creaciones. ¡Ahí va la bocha! En internet, como en la TV, lo importante es el rating.

¿Las formas cambian? Sí. Ya no hablamos el mismo español medieval ni vivimos en el mismo Uruguay del 1800. Sin embargo el contenido no ha cambiado. En el caso de Uruguay, sigue siendo el latifundio lo que rellena nuestro país. Es increíble como salvaba Historia (nacional) en el liceo con sólo saber el concepto de latifundio.
En la teoría marxista: las formas cambian pero la constante, el fondo, es la explotación, y nunca cambia. El mundo es un constante cambio de forma, pero no deja de ser el mundo. Imaginen ser eternos y ver el mundo a la sombra de un árbol en Estambul. Hace menos de 100 años vivían en Constantinopla y también supieron vivir en Bizancio cuando los romanos. El árbol siempre fue el mismo… Festejar el grito de Asencio fue hacer lo mismo de siempre pero de otra forma: copiarle a los argentinos.

¿Existe, entonces, la innovación? ¡Qué sé yo! Existen, a mi criterio, pocas innovaciones en la historia que no hayan sido de forma. La guita es siempre lo que mueve la innovación y al servicio de ella siempre está. La verdad no son muy docto en el tema J

Siempre lo hago distinto, aunque en realidad es lo mismo. Cuando uno no está inspirado, lo mejor es hablar de su falta de inspiración. Resulta tan inspirante.

3 comentarios:

  1. hablas del Dejo y de Marx... curioso porque ellos estan muy relacionados...

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  2. Es la barba... Dice "materialismo dialéctico" por todos lados.
    Propongo una columna titulada "La vida son los colores". Pudiendo ser la misma plasmada por cualquiera de los ilustres participantes de este blog, o por un invitado especial ejem ejem ejem.

    En fin, gran blog, y un retorno triunfal del pequeño gran Papelito

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  3. que grande los gurises divagando despues de fumarse un par ahi JAJAJA :D..un abrazo gurisea El Abuelo :)

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